Los humedales son clave para la hibernación de los murciélagos en un contexto de cambio climático
El objetivo principal del proyecto consistía en investigar el rol de los humedales para los murciélagos durante el invierno, evaluando las condiciones ambientales que inciden en la actividad de los murciélagos invernantes y utilizando datos climáticos históricos para discutir posibles cambios futuros en la hibernación de los mismos. Los objetivos específicos serían:
- Determinar cómo y cuándo los murciélagos utilizan humedales como reservorios de alimento y de agua comparándolo con otros hábitats circundantes
- Probar cuáles son las condiciones climáticas que afectan la actividad de los murciélagos en mayor medida en estos ambientes
- Establecer cuál es la temperatura nocturna que provoca un incremento súbito en la actividad de los murciélagos
- Proyectar los efectos del cambio climático en la actividad invernal de los murciélagos.
Área de estudio: Detyla de l'Ebre. El estudio se llevó a cabo durante los meses de enero a marzo de los años 2016 y 2017. En total se muestreó la actividad invernal de los murciélagos en 40 puntos distribuidos en cuatro hábitats diferentes del Delta del Ebro: lagunas, arrozales, zonas salicornias y zonas urbanas. Cada muestreo consistía en registrar la actividad de los murciélagos con detectores de ultrasonidos en todas las localidades, durante 7 noches consecutivas, cubriendo los cuatro hábitats descritos. Los detectores estaban programados para grabar desde la puesta de sol hasta el alba.
Los datos climáticos de la zona del Delta del Ebro se obtuvieron desde 1942 hasta 2020 a través del Observatorio del Ebro. Para calcular los efectos del cambio climático y proyectar los cambios en las temperaturas ambientales diurnas y nocturnas se utilizaron los bien conocidos escenarios climáticos del IPCC.
- Se registró una alta actividad de murciélagos en las lagunas, significativamente mayor que en otros ambientes, representando un 10% de la actividad registrada en las mismas localidades durante el verano. Las condiciones climáticas que afectaban la actividad invernal de los murciélagos en mayor medida eran la temperatura media nocturna, la temperatura máxima diaria y la velocidad media nocturna del viento.
- Se determinó que temperaturas nocturnas a partir de 11ºC podían provocar un incremento súbito y significativo de la actividad de murciélagos durante la misma noche.
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Utilizando este valor de los 11ºC se predijo y proyectó un incremento del 180% de las noches con temperaturas por encima de los 11ºC en las próximas décadas.
Este valor, junto con los escenarios climáticos del IPCC sugería que dentro de 60 años (2080-2100) los murciélagos podrían dejar de hibernar en las zonas mediterráneas costeras como el Delta del Ebro.
Los resultados demuestran que los humedales juegan un papel esencial para la conservación de los murciélagos durante el invierno. Siguiendo con la tendencia actual del incremento de temperaturas, se prevé que dentro de 60 años los murciélagos podrían dejar de hibernar en las zonas mediterráneas costeras, acentuando la importancia de estas zonas húmedas para su supervivencia. El incremento de estas temperaturas podría suponer una mayor deshidratación para los murciélagos y un incremento de sus periodos de actividad durante los meses de diciembre a febrero.
Además, este incremento de actividad de los murciélagos invernantes podría verse agravado por la desincronización con los ciclos de sus presas. Se ha podido observar cómo estos cambios en las temperaturas ya provocan un adelanto de la reproducción en algunos insectos o la modificación de algunos de sus ciclos biológicos, pero se desconocen las consecuencias sobre los ciclos vitales de los quirópteros, especialmente durante el invierno.
Otros estudios han demostrado que el incremento de temperaturas provoca un adelanto de la reproducción de algunas especies de murciélagos, potencialmente desincronizando sus primeros vuelos (durante una fase de demanda energética) de la explosión demográfica de algunos insectos.